En el marco de la II Bienal de Espacio Público de Bogotá 2021, estos escenarios por su diseño, construcción, por favorecer la relación de los peatones con el entorno y por convertirse en ‘Espacios de Vida, Sitios de Encuentro’, fueron reconocidos como espacios sobresalientes en la ciudad.
Además en esta versión, con ayuda de la ciudadanía y a través de votación virtual, fue elegido el Espacio Público Emblemático de Bogotá, resultando como merecedor reconocimiento la Biblioteca y Parque Virgilio Barco. El escenario que hace parte de la memoria colectiva de la ciudadanía de la capital competía con otros entornos como la Plaza de Bolívar, el Parque Nacional Olaya Herrera, el Eje Ambiental, el Sistema Peatonal del Centro Internacional, entre otros.
El gran ganador de la II BEPBOG 2021 que además se llevó el premio ‘Fernando Jiménez Mantilla’ fue el Borde Activo de Corferias, que cautivó al jurado no solo por la sencillez de su diseño sino porque dotó al gran recinto de la Feria de Exposiciones, de entornos que brindan una experiencia amable al peatón y a sus visitantes.
En una convocatoria que duró un poco más de tres meses, en donde arquitectos, urbanistas, entidades públicas, privadas y comunidades organizadas tuvieron la posibilidad de postular proyectos de espacios que han transformado la calidad de vida de la ciudadanía, fueron reconocidos cinco entornos en el marco de la segunda Bienal de Espacio Público de Bogotá 2021.
El Paseo Comercial de la Zona Rosa, Calle Bonita, en el centro de la ciudad, y el Borde Activo de Corferias fueron elegidos por el jurado como los escenarios más importantes de los postulados, porque su diseño, construcción y propuesta urbanística no sólo transformó el espacio público de estos lugares, sino que favoreció a los peatones, para que cuando los visitaran, vivieran una experiencia amigable en donde se promoviera la caminabilidad y el uso, goce y disfrute de los entornos.
“Pasamos por una etapa muy difícil en donde estuvimos varios meses encerrados y donde al final nos dimos cuenta que el espacio más seguro para volvernos a abrazar, para volvernos a encontrar, para ver a nuestra familia es el espacio público. Así que esa apropiación de los parques, plazas, alamedas son esos lugares donde hemos encontrado como una extensión de la sala de la casa de cada uno de los bogotanos. El espacio público es el lugar más importante de la vida diaria de cada uno de los bogotanos, porque ya es más que un lugar de paso, es un lugar en donde su revitalización nos hace sentir que la ciudad es de cada uno de nosotros”, Alejandra Rodríguez, directora del DADEP.
En esta versión, por primera vez, se convocó a la ciudadanía para que, a través de una votación virtual, fuera elegido, entre 10 opciones, la Biblioteca y Parque Virgilio Barco, como el Espacio Público Emblemático de los bogotanos. El escenario que hace parte de la memoria colectiva de la ciudadanía de la capital competía con otros entornos como la Plaza de Bolívar, el Parque Nacional Olaya Herrera, el Eje Ambiental, el Sistema Peatonal del Centro Internacional, entre otros.
"El espacio público es una clara extensión de nuestra vivienda y en la medida que este sea un espacio de calidad, lo apropiamos y lo mejoramos. Esa es nuestra responsabilidad como arquitectos, la de dar calidad y vocación al espacio público para que por transición le estemos dando bienestar a la ciudad.": Rodrigo Carrizosa, presidente de la Sociedad Colombiana de Arquitectos, seccional Bogotá y Cundinamarca.
El proyecto ‘Borde Activo de Corferias’ además se llevó el galardón ‘Fernando Jiménez Mantilla’ porque su diseño urbanístico dotó al gran recinto de la Feria de Exposiciones, de entornos que invitan a disfrutar del paisaje. Este reconocimiento es un homenaje a uno de los grandes urbanistas de la segunda mitad del siglo XX en Bogotá. Jiménez Mantilla, dejó una huella invaluable en la memoria de la ciudad a través de obras tan importantes como el barrio Muzú, el Conjunto Paulo VI, el Plan Maestro de Ciudad Salitre y el Parque Central Bavaria.
"Este borde es digno para los ciudadanos y ciudadanas. Además, es un aporte grande, era ir a Corferías y no tener un muro de cuatro metros sino tener un jardín y ese borde tan extenso que tiene actividad hacia la calle. El edificio ahora cada vez va formando parte del jardín",
La Bienal de Espacio Público de Bogotá es un certamen convocado por la Alcaldía Mayor de Bogotá, desarrollado por el Departamento Administrativo de la Defensoría del Espacio Público- DADEP, en colaboración de la Sociedad Colombiana de Arquitectos Regional Bogotá y Cundinamarca, que busca generar conciencia y una “Cultura del Espacio Público” entre la comunidad profesional, académica y la ciudadanía en general.
Conozca los proyectos ganadores:
Espacio Público Emblemático: Biblioteca y Parque Virgilio Barco:
La Biblioteca Pública Virgilio Barco y el parque que lleva el mismo nombre, se construyeron en un escenario que previamente fue botadero de basura. Este proyecto, se integró al Parque Metropolitano Simón Bolívar y llegó a potenciar la oferta recreacional, cultural y paisajística del occidente de Bogotá.
El edificio de tres pisos y estructura circular fue diseñado por Rogelio Salmona y María Elvira Madriñán, quienes propusieron para el lugar un sistema de rampas internas y externas que en la actualidad favorecen el disfrute de los escenarios al aire libre. La construcción de este gran parque responde a los esfuerzos de la ciudad, de ofrecer escenarios estéticos, armónicos y democráticos para el uso, goce y disfrute de todos y todas. Su aporte, ha sido reconocido por miles de bogotanos, quienes lo han escogido como el espacio público emblemático, en el marco de la segunda bienal de espacio público de Bogotá.
Categoría 1:
Proyecto de Espacio Público Construido: Paseo Comercial de la Zona Rosa:
El jurado destacó del proyecto el trabajo conjunto entre la administración distrital y la asociación de los propietarios vecinos, a través de mecanismos vigentes como los Distritos Especiales de Mejoramiento, para asegurar las buenas condiciones de los entornos. Ahora, los comerciantes de la zona, residentes y visitantes pueden disfrutar de los espacios públicos que promueven escenarios de encuentro y participación.
Categoría 2:
Gestión Integral del Espacio Público Calle Bonita - Centro Internacional- San Diego:
En el 2016 comenzó un trabajo de recuperación de los espacios públicos deteriorados del sector, para generar entornos urbanos de alta calidad, reparando los andenes, plantando árboles y pintando las fachadas. Estas acciones crearon escenarios coloridos que además de ser agradables a la vista, incentivan la caminabilidad y ofrecen recorridos únicos a los visitantes. En la actualidad, la zona se destaca por la variedad de restaurantes y la posibilidad de disfrutar de platos de todo tipo al aire libre.
En esta categoría, dos proyectos recibieron mención especial:
●La Gaitana - Un grito de libertad, un camino de comunidad:
En este sector de la ciudad se realizó un acuerdo entre los vendedores informales de la zona y el Distrito para revitalizar el espacio público y mejorar sus condiciones de movilidad y seguridad, sin afectar las actividades económicas del lugar. Esta acción de gestión que hoy es galardonada, nació en el corazón de Suba, y es considerada como una expresión de convivencia histórica.
●Activación Vertical Plazas de Mercado La Perseverancia y La Concordia:
La instalación de un andamio fue una alternativa para hacerle frente a la crisis económica que generó la pandemia y buscó devolverles a estos icónicos sectores de Bogotá reconocidos por su gastronomía, la oportunidad de continuar recibiendo a la ciudadanía, pero garantizando el distanciamiento social. El diseño de este mobiliario facilitó la ubicación de mesas, triplicó el aforo inicial del espacio y también las posibilidades de ingreso a los restaurantes de la plaza, aportando a la generación de espacios de encuentro y vitalidad urbana.
Categoría 3:
Espacios Privados Afectos al uso Público: Borde Activo de Corferias:
El jurado lo define como una solución audaz, que se traduce en un proyecto de gran sencillez en su concepto y en su forma, que logró cambiar la cara dura del gran recinto de la Feria de Exposiciones por una experiencia amable con el peatón y los visitantes. Es un diseño de borde, de un gran equipamiento urbano que deja atrás los entornos encerrados con rejas o muros ciegos que abundan en la ciudad. Hacia la calle se muestra como un jardín con rampas, convirtiendo la visita al lugar como una actividad amable y atractiva.